La moda sostenible se está imponiendo y los factores de este éxito son muchos. Por un lado, una mayor conciencia social sobre el impacto medioambiental de la producción industrial en masa y sin control. También un mayor nivel de responsabilidad de las empresas en lo que a conservación del planeta y gestión eficiente de los recursos se refiere. Y, finalmente, la presión de los consumidores, cada vez más implicados en hábitos sostenibles, también en lo que a moda se refiere.
De esta forma, el número de marcas que se suman a la moda sostenible es cada vez mayor. Un cambio que algunas han asumido completamente como parte de sus políticas de responsabilidad social. Otras muchas apenas han comenzado el camino, lanzando colecciones que son los primeros pasos hacia ese cambio. Un camino, en cualquier caso, de una única dirección.
El impacto de la moda en el medio ambiente
Para entender el verdadero sentido de la moda sostenible es importante conocer cuál es el impacto de la industria textil en el medio ambiente. Se calcula, por ejemplo, que es responsable del 10 % de las emisiones mundiales de CO2, o que provoca alrededor del 20 % de la contaminación de agua potable de todo el mundo.
Son datos ofrecidos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que no dudaba hace pocos años en incluir la llamada “fast fashion” en uno de los principales causantes de la emergencia medioambiental. Las razones no solo tienen que ver con las emisiones o la contaminación. También se relacionan con un incremento del consumo de ropa infrautilizada y que da pie a un círculo vicioso.
La apuesta por la moda sostenible
Ante la situación cada vez más delicada del planeta y la escasez de recursos, muchas marcas no han dudado en dar un giro radical y apostar por la moda sostenible. Son marcas que apuestan por una fabricación responsable en todos los sentidos. Una nueva forma de entender la industria textil que se mueve en diferentes ejes:
– Uso de tejidos naturales, orgánicos, ecológicos que no requieren de productos químicos para su producción. La moda sostenible, además, apuesta por el uso de materiales reciclables y reciclados.
– Apuesta por la cercanía, optando por proveedores de materias primas y talleres en un radio cercano para evitar la huella de carbono que implica el transporte.
– Implementación de condiciones laborales, de salubridad y salariales óptimas y justas para los trabajadores de esta industria.
– Campañas de concienciación dirigidas a su público objetivo para fomentar tanto hábitos de consumo sostenible como el reciclado de las prendas. En este sentido, hay que tener en cuenta que se calcula que a nivel mundial solo se recicla el 1 % de la ropa.
La moda sostenible, para las empresas del sector, no es solo una forma diferente de entender los procesos de fabricación y comercialización. Hoy en día se ha convertido en parte indispensable de la imagen de marca, en una forma más de elevar su prestigio social.
A todos los niveles, las iniciativas encaminadas a preservar el medio ambiente tienen un profundo calado en los consumidores, y cada vez adquieren mayor importancia. Adecuarse tanto a una normativa cada vez más estricta como a las exigencias cada vez mayores de los consumidores se ha convertido en uno de los valores de marca más importantes.
La moda sostenible es, así, sinónimo de compromiso social, de acción decidida por el bien común. Por ello, fabricantes textiles y marcas de ropa y calzado se suman a ella conscientes del valor que se adquiere con ese cambio de estrategia, que va mucho más allá de simples campañas de marketing.
El papel de especialistas en desarrollo sostenible
La moda sostenible es parte esencial del futuro de la industria textil. Pero, como cualquier cambio de envergadura, el paso hacia una economía circular y procesos de fabricación y comercialización más respetuosos se debe realizar partiendo de unas estrategias y objetivos bien definidos.
En ese sentido, cualquier empresa que desee iniciar el camino hacia la moda sostenible debe contar con un asesoramiento adecuado que aborde cada paso desde el conocimiento de lo que es la economía circular. Todo ello, sin olvidar, por supuesto, el conocimiento de la propia industria textil.
La formación es la clave para ofrecer ese asesoramiento que demandan hoy en día muchas empresas, no solo en la industria textil y relacionadas con la moda sostenible. A todos los niveles, es una exigencia cada vez mayor.
Para aquellos que deseen formarse en este campo, la Escuela de Unidad Editorial ofrece un máster en Economía Circular y Desarrollo Sostenible. Una vez obtenida la titulación, las salidas laborales son muchas, desde consultorías a departamentos de calidad y evaluación de impacto, así como puestos en áreas dedicadas a gestión de proyectos de economía circular o sostenibilidad. Puestos cada vez más demandados en industrias de cualquier tipo.