Los microinfluencers son aquellos que cuenta con una cifra de seguidores entre los 1.000 y los 100.000
No siempre cantidad es sinónimo de calidad. Esta es una premisa que debemos tener clara quienes nos dedicamos al marketing, puesto que la claves del éxito radica, en muchos casos, de la segmentación del público al que se dirigirá nuestra campaña y las estrategias que llevaremos a cabo para conseguir impactarle.
En este aspecto, no cabe duda de la oportunidad que aportan los influencers a las marcas. Cada vez la inversión en este tipo de marketing es mayor pero, ¿por qué decantarnos por aquellos que tienen una “modesta” cantidad de followers?
MENOR NÚMERO DE SEGUIDORES PERO MAYOR CAPACIDAD DE ENGAGEMENT
El principal beneficio de los microinfluencers como prescriptores de una marca es su autenticidad. Sus followers sienten que son personas de a pie y, por tanto, confían en las opiniones que estos ofrecen acerca de los diferente productos a través de las redes sociales.
El fenómeno de la publicidad mediante influencers surgió para conseguir que caras más o menos conocidas hablen acerca de nuestro producto de forma más asequible que cuando acudimos a aquellos personajes famosos a los que normalmente solemos ver en las diferentes campañas transmedia. Sin embargo, con el paso de los años, muchos influencers han encarecido sus precios de forma desorbitada. En este punto es en el que entra en juego la figura del microinfluencer.
Esto no quiere decir que los microinfluencers no demanden una compensación por realizar la promoción de un producto, pero su caché es notablemente inferior.
A continuación algunas de las ventajas de trabajar con microinfluencers:
- Humanizan la marca.
- Facilitan el acceso a nuestro público objetivo con una segmentación más concreta.
- Generalmente cuentan con una mayor tasa de interacción con el usuario.
- Cuentan con una alta credibilidad por parte de sus seguidores. Generan confianza e interés por su cercanía con el consumidor.
- Se trata de un tipo de publicidad mucho menos invasiva, más natural.
