Hoy en día, es rara la persona que no use una red social en su día a día. Todos conocemos alguna y sabemos para qué sirven y lo que pueden aportar. Utilizamos las redes sociales para mostrar de dentro hacia fuera, es decir, para mostrar o comunicar nuestra vida personal a los demás o para comunicar qué vendemos a nuestros futuros clientes. Pero… ¿Y si pudieras usarlas para comunicar hacia dentro, es decir, hacia tu propia organización?
Las redes sociales corporativas son una de las grandes olvidadas en el mundo del marketing y la comunicación. Tendemos a querer mostrar tanto a gente externa a nuestra empresa la labor que desarrollamos, que nos olvidamos de conseguir que nuestros propios empleados sean partícipes de lo que hacemos. Para impedir que esto suceda, debemos apostar por utilizar redes sociales corporativas en nuestro entorno laboral.
Ventajas de utilizar redes sociales corporativas
Lo más destacable de estas RRSS es que se pueden configurar al gusto y necesidad de cada empresa. Además, existen otros aspectos también muy interesantes:
- Rapidez e inmediatez: solamente es necesario disponer de un dispositivo con acceso a internet para ponerte al día de las novedades de tu empresa.
- Mejor comunicación interna: ayudan a mejorar el sentimiento de equipo, a conseguir una mayor colaboración e incluso a conocer posibles inconvenientes en tu empresa que necesitan mejorar.
- Acceso a la información: las RRSS corporativas nos ayudan a gestionar de mejor forma la información de nuestra empresa, a mantenerla ordenada y a tener un registro accesible de recursos gráficos, audiovisuales, textuales, etc.
- Mayor productividad: la agilidad que ofrecen ayuda a reducir la cantidad de correos electrónicos y de reuniones innecesarias. Así mismo, facilitan la interacción entre distintos miembros de una organización, aunque no estén en el mismo sitio físico ni trabajen mano a mano en un mismo proyecto.
- Aumento del compromiso: mejoran el sentimiento de pertenencia, haciendo que sean una herramienta ideal para conectar con las personas del entorno laboral y que su motivación y compromiso aumente, creando una imagen positiva hacia el exterior.
- Ayudan a la transformación digital: incorporar una red social corporativa en nuestra empresa, nos hace comenzar el proceso de un cambio cultural, ya que será fundamental que los empleados adquieran nuevos hábitos, procesos e incorporen esta cultura digital en su día a día.
- No dependes de algoritmos: aunque nuestra red social tome muchas prestaciones de las redes sociales generalistas, está desarrollada a medida, por lo que no dependerás de algoritmos.
- Compartir conocimiento: permite compartir conocimiento entre empleados de una forma ágil, desde cambios en clientes a novedades en el sector.
Si estás pensando en incorporar redes sociales corporativas a tu empresa, en Escuela Unidad Editorial te ayudamos a formar a tus empleados y a que el proceso de adaptación sea mucho más rápido. Con nuestro servicio de formación In Company, te ayudaremos a elaborar un plan adecuado a tus objetivos de aprendizaje, pudiendo escoger entre la opción presencial, semipresencial, online e híbrida.